Los homenajes a etarras se disparan tras completar Sánchez el pago a Bildu con los acercamientos
Julio fue un mes especialmente duro para las víctimas del terrorismo etarra. Además de que en esos días se confirmó el fin de la dispersión, con el acercamiento al País Vasco de los últimos etarras que quedaban en prisiones del sur de España, las calles de las localidades natales de esos asesinos registraron un récord anual de homenajes a los excarcelados. Se produjeron 19 actos públicos de enaltecimiento, según denuncian las plataformas de víctimas.
El recuerdo de ETA sigue muy vivo en las calles de algunos municipios del País Vasco y Navarra, donde con total impunidad se realizan regularmente todo tipo de actos en homenaje a los terroristas que salen de prisión o a aquellos que murieron durante su actividad criminal. Pintadas, fiestas populares, manifestaciones públicas exigiendo la amnistía para los presos… Las cifras de actos de enaltecimiento del pasado julio han roto la tendencia a la baja que habían iniciado el pasado otoño, cuando las asociaciones de víctimas exigieron al Gobierno que impidiese esas prácticas. Pero poco ha durado la relativa ‘mano dura’.
En las próximas semanas, de hecho, está previsto el homenaje al sanguinario etarra Henri Parot, en un acto que de momento cuenta con el silencio administrativo de la Subdelegación del Gobierno en Guipúzcoa. Vox ha presentado un escrito ante esta institución reclamando que se impida el homenaje por suponer delitos de enaltecimiento del terrorismo, odio y humillación a las víctimas. El Gobierno tampoco ha contestado, siquiera, a la carta que le ha enviado la fundación cívica Villacisneros exigiendo que se impida este acto del Ayuntamiento de Mondragón.
Desde las asociaciones denuncian que este tipo de homenajes supone un «peligro» para las nuevas generaciones, ya que se eleva «a terroristas a la categoría de héroes». Aseguran que «una sociedad digna no puede construirse sobre semejantes actos de indignidad».
«¡Presos a casa!»
El Gobierno de Sánchez ha finiquitado definitivamente la política de dispersión de presos de ETA. Las cárceles de Andalucía, donde tradicionalmente cumplían condena los presos más sanguinarios de la banda terrorista, ya se han vaciado. Los acercamientos a prisiones del País Vasco aumentan a ritmo regular cada semana, pero al colectivo de presos no le parece suficiente y ya le han marcado a Sánchez su próxima meta: libertad para todos los etarras.
«Siguiente destino, ¡a casa!». Así le reclama Etxerat al Gobierno de Sánchez que dé el siguiente paso en su política de acercamientos. En un comunicado, la plataforma proetarra exige al Gobierno que dé por «superada» la «excepcionalidad». «El Estado español y, en este caso, la Audiencia Nacional española, continúa manteniéndose en un tiempo ya superado, pero no podemos permitirnos más trabas que buscan perpetuar la excepcionalidad».
«No podemos estar otros 30 años esperando a que les apliquen la ley ordinaria, terceros grados, permisos. Por eso, los familiares, al igual que lo requiere la mayoría de la sociedad vasca, proponemos que se desbloquee de una vez todo aquello que impide que los presos realicen su recorrido», advierten al Gobierno de Sánchez.
«Tienen derecho a permisos, a terceros grados y a redenciones. Las y los presos vascos hace tiempo que iniciaron su recorrido jurídico y buena parte de ellos cumplen los requisitos para poder acceder al tercer grado, a permisos ordinarios, y a salir en libertad», reclaman.